Se trata de un alojamiento sin personal que te atienda a la llegada. Recibes un correo con un código para abrir tanto la puerta del edificio, como la del alojamiento, donde accedes a una máquina que te da la tarjeta a tu habitación. En principio, un alojamiento correcto, con espacio justo para una cama y ya está.
El problema vino cuando la primera mañana, el alojamiento se encuentra sin agua, por una avería en la cañería. Se busca la manera de que te den una alternativa y no saben. Se pide hoja de reclamación y tampoco saben. Se pide que reingresen parte del dinero invertido en el alojamiento y tampoco saben. Desde luego, de cara a los problemas, un tratamiento pésimo. Yo me he gastado más de 100€ por dos noches y me arrepiento completamente. Por suerte, tenía un conocido en un hotel cercano y me pude asear en su cuarto.
Una vergüenza absoluta. Y por parte del alojamiento, no he recibido ni unas disculpas, ni una devolución parcial del dinero.