Para la pasada diada un grupo de 15 amigos buscamos un lugar cerca de Barcelona donde poder pasar la noche y el día festivo. La elección fue Cal Simo, y no pudo ser mejor elección. Cerca de la ciudad y a la vez ubicada en un entorno natural, la casa (o las casas, pues había diferentes edificios, todos a nuestra disposición) sobrepasó nuestras expectativas: grande, infinidad de habitaciones (compartidas y suites), grandes mesas, espacios cubiertos, semi-cubiertos y al aire libre, barbacoa, piscina, barra de bar en la terraza… todo decorado y distribuido con un excelente gusto. Además, había neveras, congeladores, enchufes, cubos de basura, cubiletes para los hielos por todas partes y un equipo de música junto a la barra con luces de discoteca y TV que ayudaron a amenizar la noche.
El señor que lleva la casa, Esteban, nos atendió con cordialidad. Al ir tan solo una noche y un día, tuvo la cortesía de dejarnos permanecer en la casa hasta bien tarde para marchar cuando quisiéramos.
En definitiva, una casa perfecta para grupos grandes que quieran disfrutar de un lugar apartado donde poder descansar y divertirse.